A+ A- Restablecer
Image

Fiesta cívica impulsada por jóvenes lideresas del Centro Educativo Mbaracayú

 

El fin de semana pasado tuvo lugar una gran fiesta cívica en la Villa Ygatimí del Departamento de Canindeyú. Esta fiesta cívica estuvo compuesta por dos actividades centrales impulsadas por las estudiantes del Centro Educativo Mbaracayú (CEM): una minga ambiental y un festival artístico alrededor de la Laguna Ygatimí.  

En esta oportunidad participaron estudiantes de cinco centros educativos de la zona, donde lo admirable fue que las acciones surgieron de ellos mismos. “Cada escuela elabora su proyecto. Los niños son los que idean sobre qué es lo que van a realizar tanto dentro de la escuela como también en la lagunita”, comentó Fanny Mereles, profesora de la Escuela Héroes del Chaco.

Fue así que realizaron trabajos de recolección de basura, jardinería, pintura del muelle, colocación de carteles para identificar a los tipos de árboles e ykuas, instalación de tachos de basura, entre otros. Todo esto se dio en un ambiente de risas y de alegría, en el que primó la colaboración y la solidaridad entre los estudiantes, docentes y vecinos de la zona. “Los niños están súper emocionados. Es la primera actividad que estamos teniendo una actividad como esta en Villa Ygatimí. Se les enseña desde chiquitos la importancia y el valor de lo que tenemos acá adentro. Aprenden a querer lo nuestro y a cuidarlo principalmente”, acotó la docente de sexto grado.    

Al término de la minga se dio el inicio de la Primera Edición del Festival Lagunita 2023, donde los niños y niñas presentaron números artísticos con un gran despliegue de talento, creatividad y colorido.
Entre las presentaciones, disfrutamos del coro de niños Aché de la Escuela Arroyo Bandera, la reinterpretación de la guarania “Recuerdos de Ypacaraí” a cargo del elenco de la Municipalidad de Villa Ygatimi. Como cierre del festival todos juntos cantaron una composición escrita por la profe Aurea Mendoza, inspirada en Lagunita.

Estas acciones no surgieron de la noche a la mañana. Por el contrario, son el resultado de un largo proceso de veeduría ciudadana puesto en marcha hace más de un año desde el Proyecto Tetayguara Jesareko de Juntos por la Educación, el cual ofreció capacitación a docentes y a las lideresas del CEM para juntos guiar y acompañar a que los estudiantes realizarán sus proyectos comunitarios. “Yo le diría a mis colegas docentes que cuando se nos presente una ayuda o una oportunidad como esta, la agarremos con todas las fuerzas y trabajemos en ello. Que involucremos a los chicos, a los padres de familia y a toda la institución educativa porque es realmente muy gratificante lo que se puede lograr” opinó finalmente la profesora Fanny.

Resulta difícil concluir con una sola lección, porque como sociedad tenemos mucho que aprender e incorporar estas buenas prácticas ciudadanas. Intentaremos resumirlo en tres ideas centrales. En primer lugar, comprender el alcance e impacto que tienen las iniciativas que cuentan con la participación de varios actores de la comunidad. En este caso, se contó con el apoyo de docentes, estudiantes, la intendencia, y las organizaciones de la sociedad civil Global Infancia y Juntos por la Educación.    

En segundo lugar, la importancia de preservar y de apropiarse de los espacios públicos, principalmente de aquellos que cuentan con recursos naturales maravillosos para el disfrute de los actuales y futuros habitantes. Las autoridades no sólo no pueden solas sino que necesitan de la ciudadanía. Mayores son las posibilidades de que las autoridades actúen cuando hay una ciudadanía activa, se encuentre organizada y esté dispuesta a colaborar con un objetivo común.    

Y en tercer lugar, el impacto del liderazgo juvenil. Las chicas del CEM tenían el sueño de recuperar la Laguna Ygatimí, y lo hicieron. Sin dudas su energía, compromiso, formación y determinación permitieron movilizar a una comunidad entera, inspirar a estudiantes y a dar el ejemplo a todo el país.